Tus cinco sentidos (vista, oído, olfato, gusto y tacto) te ayudan a percibir el mundo que te rodea. Nuestro cerebro recibe señales de cada uno de estos órganos y las interpreta para darnos una idea de lo que sucede a nuestro alrededor.
De igual forma, eso que recibimos con nuestros sentidos, puede influir directamente en nuestras emociones; nos puede traer recuerdos, tristeza o mucha, mucha felicidad.
Eso mismo sucede cuando compras algo nuevo; te pondremos de ejemplo un traje de Playa Bendita. Tus cinco sentidos están activos en todo momento, pero en este caso están más atentos a lo que ven.
Activas tu sentido del oído cuando escuchas al repartidor llegar con tu paquete y te emocionas, pues sabes que lo que pediste por fin ha llegado.
Al abrir la caja activas tu sentido del olfato, pues este siempre reconoce el olor a algo nuevo, algo nunca antes usado, hecho especialmente para ti.
Y como dicen que de la vista nace el amor, este sentido te llena de emociones como sorpresa, emoción y felicidad cuando por fin ves frente a tus ojos, ese diseño que en un inicio viste a través de una pantalla. Te impactan los colores y el detalle que se puede apreciar en cada una de tus piezas.
¿Y qué es lo primero que haces una vez que abriste tu paquete? Tu sentido del tacto te ayuda con lo siguiente. Aquí puedes sentir la resistencia de la tela, lo suave que podrá ser con tu piel y al mismo tiempo la calidad del material con el que fue hecho tu pedido.
¿Y en qué momento se activa el sentido del gusto? te preguntarás. Pues ese se activa en cualquier momento en el que estés disfrutando una buena bebida o una súper comida, en la playa o en una alberca, pero siempre disfrutando mientras usas tu traje nuevo de Playa Bendita.